Viajar hacia el pasado es
ir hacia atrás, caminar por el futuro es ir hacia atrás y el
presente sólo sirve para herirte. Nunca nos lo dijeron durante las
horas que duraba el colegio, ¿te acuerdas? Se dejaron tantas
lecciones en el tintero. Pero yo disfrutaba mirándote a hurtadillas
en las horas de clase. Ojear tus carpetas llenas de canciones, todas
nuevas para mí, y tú siempre con esa sonrisa que me hacía temblar
dentro, muy dentro de mí. Yo lloraba en el recreo porque me sentía
muy pequeña, sin saber que llegaría un día en el que no podría
dejar de crecer. Ignoraba tantas cosas entonces. Continúo sin saber
otras tantas, claro, cada día me hago una pregunta como... ¿cómo
se acuna una piel huérfana de besos cuando llega la noche? Pero
tranquila, ya no es como otras veces, en las que sólo quería que
alguien me abrazase fuerte y me hundiera las manos en el pecho. Ahora
simplemente me mantengo encima del barco en precario equilibrio.
Nunca nos dijeron que cuando caminas sola necesitarás el aliento que
dejaste en otra parte, nadie te cuenta que vivir es, básicamente,
reinventar el aire. Yo nunca quise escribir, ¿sabes? Quise ser tan
egoísta como los demás. Quiero ser tan egoísta como tú y no lo
consigo. Quiero jugar únicamente a perderme en las letras que
escriban los otros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario